LA SOLEDAD DEL PAPA FRANCISCO.

Hoy nos despertamos, con el despertar de la bestia.
Escándalo en el Vaticano.
Lucha de Poder al más alto nivel.
Y fijaros que opino que este Papa del Siglo XXI, Francisco, venía con intención de cambiar la realidad eclesiástica, pero vuelve a luchar contra molinos de viento.

Y si su intención es real, como yo percibo, imagino cual debe ser su soledad, rodeado de hienas, que huyen a destapar la realidad, y que babean deseosas de hacerlo desaparecer.

Pobres noches de miedos, con tanto por hacer y tan poca libertad de movimiento.

Ese Dios en el que cree, tendrá que esforzarse en protegerlo, porque hay tantos intereses en que deje de actuar.....

Siento tener que escribir estas palabras, de las que ya anticipé en otras entradas de mi blog, pero lamentable papel de la Iglesia.

Y considero que no está en su mejor momento para aguantar nuevas envestidas.

Puede que el declive sea imparable.
Lujos, propiedades, y hasta acciones en empresas de armas.
Grandes palacios, tronos y ropajes propios de Reyes, anillos, sellos, y comodidades.

La mayoría del dinero recaudado para caridad, empleados en saciar sus egos y prepotencias.

Justo cuando medio mundo se tambalea, pasa hambre, tiene frío...

Yo ya me había percatado de la falsa de tener borregos alabando tus palabras, la fe y la creencia es el mayor poder que existe para arrastrar a los fieles al terreno previamente pretendido, pero esto pienso que es un golpe difícil de superar.

Y reconozco que me alegro de que la verdad reluzca, La Verdad, pilar fundamental de la convivencia, siempre debe relucir, duela a quien duela o perjudique a quien perjudique.

Pero me da cierta pena el papel y las opciones de acción que tiene ese pobre hombre que debe sentirse solo, tan solo como su Cristo en el desierto, pretende tirar las paredes de la corrupción como su Jesús tiró los puestos de los mercaderes en el Templo.

Jesús hacía milagros, pero a él supongo que las fuerzas deben fallarle para luchar contra este monstruo, que defiende la caridad, mientras despilfarra y malgasta.


Ángeles Vela