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martes, 31 de marzo de 2020

POR LOS MAYORES. POR MI ABUELA.


Petrilla,  tú ya no estás,  te fuiste , pero tu recuerdo está en cada mayor que fallece, en cada mayor que lucha con todo su coraje, y te veo en cada mayor que vence....



Si una generación no merece este final,  es la vuestra, repleta de verdaderos guerreros, vivisteis la guerra, el hambre,  arañasteis las paredes para sacar a vuestros hijos adelante, nos respaldasteis en la gran crisis recién sufrida, cuidasteis de vuestros nietos, llenavais frigoríficos tiritando....

Y ahora este bicho se ceba con vosotros.



Se me parte el alma, cada arruga de vuestra cara, y vuestras manos, está forjada con mucho esfuerzo,  con infinito cariño, y generosidad...

Y de nuevo os toca sufrir.

Si mi propia sangre pudiera despojaros de esta carga no merecida, os juro que ni una gota querría para mí....se me parte el alma.

Por favor , vamos a quedarnos en casa, vamos a unir nuestras manos, nuestras voluntades,  y nuestra máximo empeño, porque si alguien merece que estemos a la altura son ellos....

Sois vosotros, nuestros mayores, a quien hoy dedico mi aplauso, y por quien me quedo en casa satisfecha de hacerlo.

Ángeles Vela.



miércoles, 18 de marzo de 2020

EL SOL VOLVERÁ A SALIR.

Hoy nos sentimos usurpados, de libertad, de movilidad, de contacto, pero debemos ser fuertes,  en nuestra trinchera, que no es otra, que nuestro hogar.

Nunca una guerra tuvo defensa más cómoda,  permanecer en el hogar.

Como toda guerra, tiene víctimas,  dolor, y pena.
También tiene héroes,  quienes se sacrifican por los demás.

Pero hay una diferencia inmensa, enorme, luchamos todos en el mismo bando, no hay colores, ni partidos...
No hay más armas que limpieza y distancia y cuando llegue el momento , que llegará, de la Victoria, todos juntos celebraremos el hito,  y todos juntos lloraremos la enorme pérdida vital sufrida.

Y el Sol volverá a salir, y lo sentiremos más válido,  y disfrutaremos de nuestras calles, nuestros amigos, nuestras familias, más que nunca.

Ojalá la lucha sea corta, y las lágrimas las mínimas.

Depende de nosotros.

Ángeles Vela.




martes, 17 de marzo de 2020

GOTITAS DE SALIVA.

Y así un día se llenó el mundo con la nefasta promesa de un apocalipsis viral y de pronto las fronteras que se defendieron con guerras se quebraron con gotitas de saliva, hubo equidad en el contagio que se repartía igual para ricos y pobres, las potencias que se sentían infalibles vieron cómo se puede caer ante un beso, ante un abrazo. Y nos dimos cuenta de lo que era y no importante, y entonces una enfermera se volvió más indispensable que un futbolista, y un hospital se hizo más urgente que un misil. Se apagaron luces en estadios, se detuvieron los conciertos los rodajes de las películas, las misas y los encuentros masivos y entonces en el mundo hubo tiempo para la reflexión a solas, y para esperar en casa que lleguen todos y para reunirse frente a fogatas, mesas, mecedoras, hamacas y contar cuentos que estuvieron a punto de ser olvidados. Tres gotitas de mocos en el aire, nos ha puesto a cuidar ancianos, a valorar la ciencia por encima de la economía, nos ha dicho que no solo los indigentes traen pestes, que nuestra pirámide de valores estaba invertida, que la vida siempre fue primero y que las otras cosas eran accesorios. No hay un lugar seguro, en la mente de todos nos caben todos y empezamos a desearle el bien al vecino, necesitamos que se mantenga seguro, necesitamos que no se enferme, que viva mucho, que sea feliz y junto a una paranoia hervida en desinfectante nos damos cuenta que, si yo tengo agua y el de más allá no, mi vida está en riesgo. Volvimos a la ser aldea, la solidaridad se tiñe de miedo y a riesgo de perdernos en el aislamiento, existe una sola alternativa: ser mejores juntos. Si todo sale bien, todo cambiará para siempre. Las miradas serán nuestro saludo y reservaremos el beso solo para quien ya tenga nuestro corazón, cuando todos los mapas se tiñan de rojo con la presencia del que corona, las fronteras no serán necesarias y el tránsito de quienes vienen a dar esperanzas será bien recibido bajo cualquier idioma y debajo de cualquier color de piel, dejará de importar si no entendía tu forma de vida, si tu fe no era la mía, bastará que te anime a extender tu mano cuando nadie más lo quiera hacer. Puede ser, solo es una posibilidad, que este virus nos haga más humanos y de un diluvio atroz surja un pacto nuevo, con una rama de olivo desde donde empezará de cero. ❤️

No es mío. SANDRA GARCÍA.

CORONAVIRUS. DONDE ESTÁ EUROPA?

No se si es cosa mía,  arrastrada por el escepticismo,  la incredulidad....

Pero me falta Europa.
Medidas centralizadas que unifiquen criterios de Estados miembros.
Presupuesto para paliar medidas , acorde a las circunstancias.
Reparto globalizado de material sanitario, de unos países a otros.
Cesión de personal cualificado de unos paises a otros, todo tutelado por la Unión Europea.

Si no obtenemos esa protección mínima,  me pregunto.....

Dónde está Europa?


Ángeles Vela.

domingo, 15 de marzo de 2020

Bellísima reflexión del psicólogo F. Morelli, que circula entre nuestros queridos vecinos italianos:
 “Creo que el universo tiene su manera de devolver el equilibro a las cosas según sus propias leyes, cuando estas se ven alteradas. Los tiempos que estamos viviendo, llenos de paradojas, dan que pensar... En una era en la que el cambio climático está llegando a niveles preocupantes por los desastres naturales que se están sucediendo, a China en primer lugar y a otros tantos países a continuación, se les obliga al bloqueo; la economía se colapsa, pero la contaminación baja de manera considerable. La calidad del aire que respiramos mejora, usamos mascarillas, pero no obstante seguimos respirando... En un momento histórico en el que ciertas políticas e ideologías discriminatorias, con fuertes reclamos a un pasado vergonzoso, están resurgiendo en todo el mundo, aparece un virus que nos hace experimentar que, en un cerrar de ojos, podemos convertirnos en los discriminados, aquéllos a los que no se les permite cruzar la frontera, aquéllos que transmiten enfermedades. Aún no teniendo ninguna culpa, aún siendo de raza blanca, occidentales y con todo tipo de lujos económicos a nuestro alcance. En una sociedad que se basa en la productividad y el consumo, en la que todos corremos 14 horas al día persiguiendo no se sabe muy bien qué, sin descanso, sin pausa, de repente se nos impone un parón forzado. Quietecitos, en casa, día tras día. A contar las horas de un tiempo al que le hemos perdido el valor, si acaso éste no se mide en retribución de algún tipo o en dinero. ¿Acaso sabemos todavía cómo usar nuestro tiempo sin un fin específico? En una época en la que la crianza de los hijos, por razones mayores, se delega a menudo a otras figuras e instituciones, el Coronavirus obliga a cerrar escuelas y nos fuerza a buscar soluciones alternativas, a volver a poner a papá y mamá junto a los propios hijos. Nos obliga a volver a ser familia. En una dimensión en la que las relaciones interpersonales, la comunicación, la socialización, se realiza en el (no)espacio virtual, de las redes sociales, dándonos la falsa ilusión de cercanía, este virus nos quita la verdadera cercanía, la real: que nadie se toque, se bese, se abrace, todo se debe de hacer a distancia, en la frialdad de la ausencia de contacto. ¿Cuánto hemos dado por descontado estos gestos y su significado? En una fase social en la que pensar en uno mismo se ha vuelto la norma, este virus nos manda un mensaje claro: la única manera de salir de esta es hacer piña, hacer resurgir en nosotros el sentimiento de ayuda al prójimo, de pertenencia a un colectivo, de ser parte de algo mayor sobre lo que ser responsables y que ello a su vez se responsabilice para con nosotros. La corresponsabilidad: sentir que de tus acciones depende la suerte de los que te rodean, y que tú dependes de ellos. Dejemos de buscar culpables o de preguntarnos porqué ha pasado esto, y empecemos a pensar en qué podemos aprender de todos ello. Todos tenemos mucho sobre lo que reflexionar y esforzarnos. Con el universo y sus leyes parece que la humanidad ya esté bastante en deuda y que nos lo esté viniendo a explicar esta epidemia, a caro precio. (Cit. F. MORELLI, traducido al español) Mucho ánimo a todos 😘

Totalmente de acuerdo, esto es solo un ejemplo de todo lo que vendrá, subida de niveles marinos, subida de temperatura, y desequilibrio natural. Z ver si aprenden los grandes gobiernos y lobis. Y a ver si aprendemos, nosotros ciudadanos del mundo.

Ángeles Vela.

martes, 10 de marzo de 2020

CORONAVIRUS. REPONSABILIDAD . CIVISMO.

Las autoridades a veces, muchas veces van con retardo, posiblemente justificado, el miedo y el caos, es el peor enemigo de la gestión de cualquier crisis, y las medidas deben ser proporcionales,  y efectivas.

Pero poco pueden hacer las medidas gubernamentales,  si no somos responsables, con el bien común.

Se acercan fechas lúdicas importantes, Fallas, Semana Santa, Feria de Sevilla, finales de fútbol,  nadie se las quiere perder, ni nadie se atreve a suspenderlas por el coste político,  y sobre todo económico que supone.

Pero apelo , no a esos gobiernos municipales, autonómicos, estatales,  que se pierden entre el desprestigio por anticiparse, y el peligro de dormirse en los laureles.

Apelo a vosotros, ciudadanos, atendamos a las recomendaciones,  evitemos aglomeraciones, no viajemos, salvo causa mayor, higiene intensa de manos,

Se que el pánico es malo, pero la crisis sanitaria se va de las manos.

Y si no ponemos todos nuestro granito de arena, el coste vital, será muy grave.

Se que muchos sectores, odiarán mis palabras, el turismo sustenta España, y no decir Andalucía,  en primavera, pero esta movilidad general , hace imposible cerrar los grupos de contagio, controlarlos,  reducirlos

Comencé confiando en el poder de control de nuestra sanidad, pero con esta globalización de movimientos,  es imposible.  Y no se hasta que punto, seguimos los pasos de Italia, muy de cerca.

Cuando un enfermo de cáncer está muy invadido la solución es dejarlo a cero de defensas, con el riesgo que supone, para reiniciar la creación de células nuevas.
Creo que hasta que no detengamos nuestro movimiento sin límites,  y controlemos los casos localmente, esto es incontrolable.

El coste económico sería enorme, difícil de implementar,  por eso os pido a vosotros, reducir a lo indispensable los viajes, no saludar con contacto, ampliar la distancia entre personas, ante cualquier síntoma,  llamar a servicios sanitarios, y no acudir a centros de salud, sin volvernos  paranoicos.  Simplemente civismo.

Las mayores medidas, las tenemos que implementar nosotros mismos, en nuestro quehacer diario.

Hoy ante un positivo en el congreso, Señor Smith, se suspende las sesiones, y hablando sin conocimiento real, por pura suposición,  seguro que seguirán  cobrando...

Ante un positivo en una empresa,  suspenden la actividad de la empresa? Quién paga a los trabajadores?
Y alquiler, gastos fijos.....

Las empresas receptoras de servicios, se quedan desatendidas?

Comienzan a lanzar medidas, pero muy difusas, y poco concretas.
Quieren que tengamos la sensación de que lo tienen controlado, pero recién comienzan a moverse.

Ya van tarde, pero nunca es tarde, si la dicha es buena.

Espero que ya sean conscientes que la sociedad mundial, más que nunca, en las últimas décadas,  requieren decisiones sanitarias,  políticas y económicas,  que respondan a la necesidad actual, y devuelvan la normalidad al mundo.

Y no estaría de más,  que este susto, les sirva para invertir menos en armas, y más en investigación médica.


POR EL CONTROL DE ESTE VIRUS.  SEAMOS RESPONSABLES.

ANGELES VELA.






martes, 3 de marzo de 2020

CORONAVIRUS.SANIDAD PUBLICA Y UNIVERSAL.

En Sevilla, Hospital Virgen del Rocío.   Curan con un medicamento contra el VIH, al primer paciente sanado de coronavirus, con tratamiento.

En primer lugar quiero decir lo orgullosa que me siento de ser usuaria de ese hospital, referencia en todo el mundo por su buen hacer.
Dueño de la mejor área de quemados, de España.
Poseedor de profesionales espléndidos en cualquier especialidad.
Y sobre todo, reseñar su milagrosa área de oncología infantil, no por realizar milagros,  el puro milagro es el trato, las instalaciones, la maquinaria, y unos médicos_as, sanitarios-as y enfermeros-as ,que no de oídas, vivido en mis carnes, tras 8 años de voluntaria en Andex, que son ángeles caídos del cielo.

Todo se armoniza entre aquellas paredes para curar a esos niños, pero mucho más,  para aliviar a las familias, apoyarlas, etc...

Mi vela encendida en agradecimiento a todo el equipo humano que conforma aquella ciudad hospitalaria.

Y mi queja y juicio de valor, muy crítico,  a los Gobiernos, del color que sean, estatales, o autonómicos,  que recortan en sanidad. Que sobrecargan de trabajo a esos médicos,  a ese personal, que obligan a largas listas de espera, que saturan salas de urgencia.

Cuando acudimos enfermos a estos centros, y nos desesperamos, descargamos nuestra rabia contra el que nos atiende, comprensible, pero injustificable,  ellos son las primeras víctimas.

ANTE LA ENFERMEDAD, NO CABEN RECORTES, NI AUTONÓMICOS,  NI ESTATALES,  NI ASI VENGAN DE EUROPA.

POR UNA SANIDAD UNIVERSAL, GRATUITA,  PÚBLICA,  Y DE LA MEJOR CALIDAD POSIBLE.
Y MI APLAUSO MAS SENTIDO A VOSOTROS, PROFESIONALES QUE A VECES TENEIS MAS CORAZÓN QUE MEDIOS.

INFINITAS GRACIAS.

ANGELES VELA.